Los cuentos suelen terminar con "se casaron y vivieron felices para siempre", pero ¿qué pasa después?
Este relato empieza donde los demás finalizan: El príncipe y la princesa se casan. Tienen un hijo, luego otro. Ahora deben enfrentarse a la vida, lo cotidiano. Empieza una aventura permanente, la aventura más grande que hayan vivido nunca.