Este es un libro que no ha perdido vigencia y se ha consolidado a lo largo del tiempo; todo aquel que se acerque a su portada intuirá que su contenido aborda uno de los géneros más gustados y sugeridos por el público infantil: el terror.
En una llanura oscura, muy oscura, había un bosque oscuro muy oscuro y en el bosque hay una casa oscura muy oscura en la cual nos adentraremos para conocer su terrible secreto, bajo la mirada sigilosa de un gato oscuro muy oscuro temblaremos de terror.
El juego que se le propone al lector es uno lleno de ingenio y que al hacerlo participe, lo conduce por los senderos y pasillos a través de la ilustración. En la selección de la gama de colores, luz y matices también radica la cadencia de esta historia.
Un libro que de a poco se va convirtiendo en un clásico y que vale la pena volver a leer, explorar y acercar a las nuevas generaciones.