En sus cuarenta y siete años de vida, no hubo un tema que no tratara George Orwell –nacido Eric Arthur Blair– con acierto, claridad y valentía. Esta antología anfibia de ensayos lo demuestra.
El volumen revela una de sus facetas menos conocidas, la de crítico literario, perfectamente consecuente con toda su obra. No podía ser menos, tratándose del autor que mejor desnudó los vicios del idioma inglés, proponiendo las más sencillas soluciones. Otro de los rasgos dominantes de su vida, la valentía, es evidente en esas piezas. Así, por ejemplo, defiende Trópico de Cáncer, de Henry Miller, a pesar de ser denostado por todos.
Sus entrañables memorias como asistente de librería de lance, uno de los pocos trabajos regulares que tuvo, conviven aquí con sus irónicas reflexiones sobre la inflación novelística que padece la industria editorial, una discusión que, como suele pasar con Orwell, podría tenerse en nuestros días.
Además, el libro incluye algunos de sus más célebres textos políticos, como el ensayo sobre el amor británico por la autonomía individual y la propiedad privada, que vacunan a ese país contra la tentación comunista que seduce a Europa.
El león y el unicornio prueba, en suma, que leer a Orwell es, hoy, más necesario que nunca.