Casi 30 años después de su muerte, Maxine Gordon, viuda y representante del famoso músico de jazz Dexter Gordon, completa y termina la obra que comenzó su esposo.
Criado en una peculiar familia afroamericana y compañero de Joe Newman, Ernie Royal o del mismísimo Louis Armstrong, se convirtió en símbolo de la clase baja negra expatriada y formó parte de una generación que luchaba contra los estereotipos que la sociedad impelía. “Una vida de improvisación musical no puede ser gobernada por las reglas de otros”, afirmó.
Esta biografía, documentada y acompañada por cartas personales y anécdotas, es también la historia de un desarrollo musical originado por un grupo reducido de jóvenes que querían tocar algo nuevo y auténtico: el bepop.
Como en una composición de jazz, el libro mezcla temas, anécdotas, y selecciones personales que reflejan su vida colorida y la gran época del bebop, hasta la nominación al Óscar como mejor actor por su papel en la aclamada película de Bertrand Tavernier Round Midnight.